Así fue la 10ª Semana de Cine Portugués en Buenos Aires

La 10ª Semana de Cine Portugués en Buenos Aires se llevó a cabo del 23 al 26 de febrero en el MALBA y del 1° al 8 de marzo de 2023 en la Sala Leopoldo Lugones. Contó con el apoyo del Camões IP, de la Embajada de Portugal en la Argentina, de la Fundação Calouste Gulbenkian, de la Cinemateca Portuguesa y del MALBA.

Producida y programada por VAIVEM, asociación cinematográfica con sede en Buenos Aires y Lisboa, la Semana de Cine Portugués sigue sosteniendo, después de una década, un espacio de programación anual y exclusivo a la altura de la calidad y originalidad del cine luso.

La Semana de Cine Portugués construyó a lo largo de estos 10 años una relación con el público argentino que convirtió a este evento en una de las citas imprescindibles del calendario cinéfilo de cada año. Las propuestas que atravesaron toda esta primera década incluyen estrenos, focos retrospectivos, visitas de cineastas, charlas y rescates del cine clásico o incluso cine mudo. Se trataron de aventuras y desafíos que consolidaron y, al mismo tiempo, fueron definiendo una mirada.

Comprometida con la difusión de lo mejor del cine portugués, acentuando la amplitud del espectro de esa cinematografía y ofreciendo una programación que se piensa como mapa de un territorio tan heterogéneo como estimulante, esta edición se dividió entre una programación firmada en su totalidad por mujeres, en el MALBA, con la presencia de la luminosa directora Cláudia Varejão. y la retrospectiva y presencia de Pedro Costa, uno de los directores más fundamentales y brillantes de la actualidad, en la Sala Leopoldo Lugones.

Esta 10ª edición fue también la primera en toda la historia de la Semana de Cine Portugués que tuvo la totalidad de su programación en el MALBA integrada por películas dirigidas por realizadoras mujeres. El interés por incorporar una perspectiva de género a la lectura del presente y el pasado del cine es una decisión política que, lejos de agotarse en la inclusión y la diversidad como objetivos deseables y necesarios, nace también de la necesidad de visibilizar un corpus de obras que se imponen por sus propios méritos cinematográficos, y sirven de vivo testimonio de la importancia central que estas autoras tienen para entender y pensar el cine de este país en su totalidad.

El 2023 encuentra al cine portugués contemporáneo en un estado de riqueza que combina la consolidación de autores consagrados, acompañado por un recambio como lo demuestran las óperas primas que integraron la sección Panorama. Por un lado, Corpo a Corpo de Inês Gil, un lúcido estudio sobre la identidad y el cuerpo que tiene como protagonista a Ana Gläser, pionera del fisicoculturismo femenino en Portugal, y, por otro lado, Alma Viva, el primer largometraje de Cristèle Alves Meira, que después de una serie de cortometrajes seleccionados para la Semana de la Crítica de Cannes irrumpe con esta película sobre un verano transformador en la vida de una niña, atravesado por los vínculos familiares, las supersticiones pueblerinas y la magia real. También esta fue la ocasión de encontrarse con la obra de Cláudia Varejão, quien estuvo presente en la sala acompañando sus dos últimos largometrajes, caracterizados por una sensibilidad manifiesta, una luz propia y una mirada aguda. Su documental Amor Fati, que retrata las múltiples posibilidades que el amor tiene de manifestarse en el vínculo entre dos personas, así como en su primera ficción, Lobo e Cão, que integró la competencia oficial de la última edición del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata y narra el viaje de descubrimiento de Ana y sus amigos, atravesando su agitada juventud en una isla tradicional y conservadora del archipiélago de Azores. Completaron el Panorama de esta edición O Trio em Mi Bemol, última película de la gran autora Rita Azevedo Gomes, que vuelve a colaborar con Pierre Léon (esta vez dirigiéndolo, en una exquisita interpretación junto a Rita Durão) adaptando cinematográficamente una obra escrita por Éric Rohmer; y Viagem ao Sol, un poderoso documental que, utilizando exclusivamente material de archivo, ilustra los relatos en primera persona de quienes vivieron en carne propia una de las consecuencias ocultas de la Segunda Guerra Mundial. Además, después de encargarse de la dirección de fotografía de la alucinada visión distópica de Era uma Vez Brasília, Joana Pimenta se une a Adirley Queirós para realizar Mato Seco em Chamas, su primer largometraje en el rol de directora, que presenta una afilada indagación en el presente político y social de nuestra región a través de un prisma casi post apocalíptico.

En los focos que complementaron la programación volvió a tener un lugar importante la sección dedicada al Poscolonialismo, integrada por un documental inmersivo y detallado de Margarida Cardoso sobre la vida de la militante y dirigente comunista Sita Valles (Sita – Vida e o Tempo de Sita Valles); el último documental de Filipa César y Sónia Vaz Borges, Mangroove School, que retrata unas peculiares escuelas selváticas en Guinea-Bissau; y Paz, un cortometraje de Marta Ramos y José Oliveira que acompaña a un grupo de excombatientes de las guerras de ultramar con uno de los finales visualmente más poderosos del último año.

Un foco que tuvo su primera aparición en la Semana de Cine Portugués fue el de cine Experimental, compuesto íntegramente por cuatro cortometrajes que dan cuenta de la efervescencia y las posibilidades de este campo. Y, por último, contando una vez más con la inestimable colaboración de la Cinemateca Portuguesa, el foco Autoras reunió cuatro óperas primas -que comparten la incomprensión o las dificultades para exhibirse que padecieron en su momento y que hoy, con justicia, son consideradas y jerarquizadas como las obras medulares que son-, proponiendo un recorrido por la historia del cine portugués del siglo XX. Três Dias Sem Deus, primer largometraje de ficción sonoro dirigido por una mujer; Trás-os-Montes, la obra maestra de Margarida Cordeiro y António Reis; Máscaras, documental de Noémia Delgado, que para entonces ya había brillado como montajista en películas de Paulo Rocha y Manoel de Oliveira; y la tan enigmática como bella O Movimento das Coisas de Manuela Serra.

Unos días después, en la Sala Leopoldo Lugones, la Semana de Cine Portugués se enorgulleció de presentar un evento cinematográfico en sí mismo, una retrospectiva que recorrió los largometrajes de Pedro Costa, uno de los autores más importantes del cine contemporáneo, quien estuvo como invitado especial presentando las películas en la sala y hablando con el público. El foco estuvo integrado por O Sangue (1989), Casa de Lava (1994), Ossos (1997), No Quarto da Vanda (2000), Onde Jaz o teu Sorriso Escondido? (2001), Juventude em Marcha (2006), Ne Change Rien (2009), Cavalo Dinheiro (2014), y Vitalina Varela (2019). Nueve títulos que componen un profundo y exhaustivo recorrido por la filmografía de este director imprescindible.

Costa participó además de un encuentro abierto en el hall del Teatro San Martín, donde conversó con el crítico y director de la Sala Leopoldo Lugones, Diego Brodersen, y también dio un seminario en la Universidad Torcuato di Tella, evento exclusivo para alumnos del Programa de Cine de esa casa de estudios.